4 noviembre 2020
En toda Europa y en todo el mundo, la bicicleta está viviendo un momento dulce, y nos encanta comprobar que también son cada vez más las personas que se mueven en bici por nuestra ciudad.
Si tú también quieres ser un ciclista urbano y aún te rondan algunas preguntas “logísticas” por la cabeza, te invitamos a leer la entrevista que le hemos hecho a Jaime Novo, en la que nos cuenta todo lo que debemos saber para movernos en bici por Madrid. Jaime es periodista en Onda Cero donde, entre otras cosas, desde hace 8 años dirige Piensa en Bici y aboga por el uso de la bicicleta como opción de movilidad. No en vano ha sido elegido “alcalde de la bicicleta en Madrid” en el marco de la iniciativa que ha puesto en marcha la empresa holandesa BYCS para contribuir a que los valores de salud y sostenibilidad que conlleva el uso de la bicicleta se extiendan por todas partes.
Desde la Asociación CiclaMadrid queremos agradecerle a Jaime su tiempo, sus respuestas claras y cercanas a nuestras (muchas) preguntas, y toda la inspiración que nos ha transmitido. Aquí os dejamos la entrevista, ¡que la disfrutéis!
Por supuesto. Siempre pensamos que es cosa de unos pocos con una forma física excelente pero no es así. Incluso el ciclista más veloz y preparado irá siempre muy despacio a ojos de cualquier conductor. Solo hace falta una bici y las nociones básicas relativas a la normativa. Recordemos que no es lo mismo saber montar en bici que saber circular en bici. Hay muchas personas en Madrid dispuestas a ayudar a quien quiera empezar, sin ir más lejos, nosotros mismos en la Alcaldía de la Bicicleta de Madrid.
La normativa no hace diferencia de edad, sino de tipo de vehículo. Me explico: Si la bicicleta no supera los 435mm desde el sillín al suelo, está considerada un “juguete” y no podrá circular por la calzada. Por encima de esa altura, ya no es ningún juguete. Si el niño es menor de edad siempre es responsabilidad de los padres que deben acompañarlo.
La normativa relativa a la ciudad de Madrid está en este enlace. No es muy diferente a la de otras ciudades, pero hay un batiburrillo importante en cuanto a normativa de circulación ciclista en nuestro país. Está derivada a las comunidades autónomas y estas la derivan a las localidades. Tiene lógica porque en cada sitio hay zonas específicas en las que los ayuntamientos deberán redactar la normativa y eso no se puede hacer a nivel estatal. Sea como fuere, la DGT dispone de un Plan Estratégico Estatal de la Bicicleta desde el que se establecen las normas básicas para la circulación de bicicletas, pero, insisto, reinterpretables por los ayuntamientos.
Para vencer los primeros miedos es ideal buscarse compañía de otro ciclista algo más experimentado. Buscarse la ruta con anterioridad también es básico para eso porque conseguimos dos objetivos: el primero es buscar calles más tranquilas y no pensar tanto en el tráfico. En segundo lugar porque esa ruta, bien pensada, podría hacer que nos evitemos algunas cuestas. Puede que hagamos algún kilómetro más, pero todas las cuestas en Madrid son evitables si dibujamos bien nuestra ruta.
De todos modos, siempre nos quedará una bici eléctrica que nos dará ese empujón cuando más lo necesitemos.
Es importante destacar que el tráfico en Madrid es mucho menos peligroso de lo que parece. Nadie quiere tener un accidente con nadie y en líneas generales todo el mundo anda con cuidado para no tener percances. El respeto al ciclista es enorme en Madrid, aunque no lo parezca.
No. Es otra de las grandes ventajas de Madrid. El carril bici es opcional.
En absoluto. El ciclista ha de circular por el carril que mejor le convenga para su recorrido. Y siempre por el centro del carril, aunque el carril sea el izquierdo.
No. La circulación de bicicletas por las aceras está prohibida en Madrid. La acera es solo para los peatones. Si tenemos que atravesar un tramo de acera, hay que bajarse. Conviene recordar que los pasos de cebra funcionan a todas luces como aceras, es decir, que si tenemos que cruzar un paso de cebra, también debemos ir caminando con la bici en la mano. No solo porque está prohibido, sino, y sobre todo, porque es tremendamente peligroso para el ciclista cruzar en bici un paso de cebra. Vamos mucho más rápido que un peatón y suele ser motivo de susto y accidente.
De todos modos, en muchos sitios aún existen las llamadas “aceras bici”. Son carriles bici que circulan sobre las aceras. Evidentemente, ahí sí está permitido circular en bicicleta.
Esa es la madre del cordero. Debes seguir por la calzada, junto al resto de vehículos. La red de carriles bici en Madrid es inconexa y desordenada. Es bastante habitual que haya carriles bici de 200 metros que terminan sin otra opción que la acera. Bajemos de la bici, pongamos las ruedas en la calzada y continuemos. Es más divertido.
El uso del casco siempre es muy recomendable y aconsejable. Su uso no tiene ninguna desventaja para el ciclista. Todo lo contrario. Lo que sí se ha demostrado que es poco ventajoso es hacerlo obligatorio. Hay estudios y casos reales de países donde, tras hacer el uso del casco ciclista obligatorio se ha visto cómo descendía el número de bicicletas en las calles. Esto responde a que, hacer obligatorio el uso del casco, proyecta la sensación de peligro y no invita a nuevos ciclistas.
La distancia que les pedimos al resto de vehículos es de metro y medio. Hagamos lo mismo desde nuestras bicis. En general, cuanto más lejos estemos, más seguros. Es como la distancia de seguridad entre dos vehículos: si el que tenemos delante frena de repente y nosotros estamos suficientemente lejos, tenemos más tiempo para reaccionar.
Muchos de los semáforos de Madrid tienen “adelanta bicis/motos”. Siempre que la vía lo permita, podremos avanzar para colocarnos los primeros.
En líneas generales sí. No obstante, en Madrid hay varias calles donde se nos permite circular en ambas direcciones a los ciclistas aunque sea de una sola dirección para el resto de vehículos. Son todas aquellas cuyo límite de velocidad es a 20 km/h y acera y calzada están al mismo nivel. Por ejemplo, la Calle de las Huertas.
Por supuesto que deben ser respetadas. Somos un vehículo más y debemos ceñirnos a las normas de tráfico.
Debes señalizar porque es más seguro para ti. Una de las máximas en bicicleta es ser previsible y visible. Para girar a la izquierda debemos extender el brazo izquierdo. Para girar a la derecha, podemos hacerlo con el brazo izquierdo en L o con el derecho extendido. Si queremos parar, agitaremos de arriba abajo el brazo izquierdo. Como si quisiéramos volar.
Las zonas especialmente aptas para iniciarse son las calles tranquilas. Hay mapas en Internet con esas calles tranquilas que podrán llevarte a todos sitios. Y, créeme: se puede llegar en bicicleta a todas partes.
Es una de las asignaturas pendientes, pero cuantas más bicicletas haya, más aparcabicis aparecerán. En general todas las bicis pueden ser robadas si el ladrón cuenta con tiempo y soledad, ergo dejemos la bici sola el menor tiempo posible, con un buen candado (sinónimo de caro) y con mucha afluencia de gente. Pongámoselo difícil al caco.
Para trayectos, Ciclogreen, sin duda. En cuanto a los aparcabicis, están en GoogleMaps.
Pues con toda esta información y con las ganas que tenemos de llenar nuestra ciudad de bicicletas, ya sólo nos queda empezar a rodar! Moverse en bici viene bien a nuestra salud y a la de nuestras ciudades, así que os animamos a sumaros a esta forma de movilidad sostenible y a seguir disfrutando de Madrid, mejor en bicicleta.